“Desde el primer momento supe que entraba a la historia en una situación complicada. Yo había visto la pareja que formaba Juan Darthés con Calu Rivero y era hermosa, ¡con muchísima química! Pero siempre fui una arriesgada, y me mandé igual”. Florencia Ortiz confiesa de esta manera su único y muy breve reparo, a la hora de evaluar su incorporación a Dulce amor (a las 23.30, por Telefe), donde interpreta a Gisela, un viejo amor de Julián (Darthés), que reaparece con fuerza en la vida del galán.
Pero Gisela es jugará mucho más que una historia romántica. Su personaje es la secretaria y mano derecha de Montalbán, el villano que hace Gerardo Romano. Sin embargo, pronto ella le confesará a Julián que su verdadero objetivo es descubrir qué tanto tiene que ver el empresario con un accidente que casi termina con la vida de su padre, y que lo dejó postrado de por vida. “Lo que más me gusta de este personaje es que tiene un carácter muy fuerte, obligatoriamente, dado que la vida no le fue fácil. Y también el hecho de que ella haya sido el gran amor al que Julián tuvo que renunciar hace mucho tiempo, me dio muchos más ingredientes y posibilidades”, le cuenta Ortiz a Clarín, todavía sorprendida por la repercusión que su Gisela tiene entre el público.
Casada con un músico, y con una hija de 4 años, Eva, esta sagitariana de sangre viajera parece al fin haberse establecido en su tierra, aunque confiesa que apenas tiene unos días los aprovecha para alejarse unos cuantos kilómetros de la ciudad. Cuando ya tenía transitadas unas cuantas telenovelas, casi todas en el rol de villana (desde 90-60-90Modelos hasta Milady , Herederos del poder , Muñeca brava o Los buscas de siempre ), su espíritu aventurero la llevó a instalarse en Madrid, donde abrió un local de ropa, trabajó en una película, en un programa de tevé y, por supuesto, aprovechó para viajar por toda Europa.
“Volver siempre es difícil, porque tenés que recuperar un lugar que te había costado hacerte, pero al mismo tiempo tiene algo de una imagen fresca, como de renovación”, reflexiona. Fue entonces cuando el productor Quique Estevanez le ofreció hacer una mucama en Amor en custodia , y la rueda volvió a girar. Su trabajo más reciente fue en Los únicos , donde, claro, hizo de villana.
Clarín
No hay comentarios:
Publicar un comentario