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13 jul 2014

Miradas opuestas a "MasterChef"


A favor: La cocina del show

La cocina puede ser una metáfora del infierno (los que hacen Hell’s Kitchen lo saben mejor que nadie), o bien un ámbito de creación y refinamiento donde se entiende por qué es posible hablar de artes culinarias.

Masterchef, tanto en su versión original como en la producción argentina que pone al aire Telefe, es una combinación de ambas posibilidades. Por momentos, el universo gourmet se convierte en un teatro de fracasos y humillaciones, con escenas que se filtran desde las hornallas y sartenes hacia otras problemáticas humanas reflejadas con distinto grado de dramatismo. Pero también es la ocasión para que personas de acá y de allá se prueben en distintos desafíos y alcancen la excelencia en una disciplina que, entre otras cosas, implica producirle bienestar a los otros.

Donato de Santis, German Martitegui y Christophe Krywonis son los jurados en materia de sabores, texturas y aspectos visuales de los platos, evaluando el equilibrio entre simpleza y sofisticación, pero más que nada conforman un afianzado trío de villanos entrenados para poner en apuros a los participantes. Es verdad que a veces se roza el maltrato, y que los cocineros amateurs deben someterse a decálogos soberbios, pero todo es parte de una muy bien guionada trama de auge y caída, que utiliza el suspenso en las dosis necesarias. Por eso la edición es absolutamente dramática, sobre todo en los momentos previos a la conclusión de los platos, cuando la tensión lograda invita siempre a esperar lo peor.

Hay risas. Hay lágrimas. Rivalidades. Alianzas y traiciones. Masterchef es un gran culebrón. Y sale en su punto justo.

En contra: En el horno

Un padre que reprende a su hijo. Un docente que cuestiona la capacidad de un alumno delante de los demás. Un jefe que se burla de un empleado. El abuso de poder y la crueldad pueden tener mil variantes. Y la que más rinde en el rating parece ser la relación dominante/dominado de los jueces de realities y sus concursantes. Eso que Simon Cowell dejó como marca registrada en American Idol (la idea de que el personaje pérfido de las ficciones es clave también para estos formatos) es llevado al extremo en Masterchef. Y no tanto porque los jueces sean unos tiranos de abdomen abultado, más bravos y marciales que el nazi de la sopa de Seinfeld, sino porque quien armó el "casting" de los participantes se encargó de reclutar a los más experimentados al lado de los más amateurs. Es decir, los que tienen al menos algunas armas para defenderse y los vulnerables.

Es insólito, pero parte del encanto que muchos ven en Masterchef es apreciar cómo una señora intenta hacer una bruschetta sin saber muy bien qué es (y sin que nadie se lo explique), o como un improvisado cocinero mira una rana sin entender cómo convertirla en un plato gourmet. Y si bien cada concursante puede hacerse cargo de su decisión de ingresar en un certamen que ya en su versión original se caracteriza por no tener piedad con los aprendices, corre por cuenta de los realizadores (y de los espectadores) que unos impulsen y otros se regocijen con los episodios en los que queda en evidencia la ignorancia ajena. ¿Cuántos de los que disfrutan esos momentos saben hacer un lomo Wellington?

"Bajemos a tierra, son chicos que no saben cocinar"


Christophe Krywonis es uno de los "platos fuertes" de"Master Chef," el reality de "Telefe". El chef internacional habló con DiarioShow sobre esta experiencia en la televisión y su trayectoria. También se animó a opinar sobre Laura, una de las participantes más polémicas.Mirá lo que dijo.

Por su fama de “malo”, Christophe Krywonis se transformó en uno de los “platos fuertes” de “MasterChef”, el reality culinario que se emite los domingos a las 22.15 por Telefe. Con comentarios picantes y su vozarrón característico, mezclado con acento francés –que por lo general intimida a los participantes–, el jurado
conquistó a los espectadores que esperan con ansias cada una de sus devoluciones.

El reconocido chef internacional, que junto al argentino Germán Martitegui y el italiano Donato de Santis evalúan a los cinco concursantes que aún quedan en carrera para consagrarse como el mejor cocinero amateur de nuestro país, dialogó con DiarioShow acerca de la gran repercusión del ciclo, la receta sobre el exitoso rating,
su personaje y su vida.

Oriundo de Blois, una ciudad a doscientos kilómetros de París, Christophe ya lleva 25 años viviendo en la Argentina, habla como porteño y hasta utiliza el lunfardo. “En la cancha se ven los pingos”, respondió con picardía al ser consultado por las críticas de los seguidores del certamen haciaLaura, la ama de casa de cuarenta
años que despierta sentimientos encontrados en el público.

“Hablan sin saber. Ella tiene su forma de ser, que pone nerviosa a la gente porque llora mucho y porque tiene el pelo siempre en la frente, y eso que nosotros se lo marcamos en todo momento. Aporta mucho al programa. Su desprolijidad es muy fácil de criticar, pero hay que estar en su lugar”, sostuvo.

Luego, el creador del estilo bistró en Palermo Hollywood se refirió a la gran presión a la que está expuesto cada uno de los competidores: “Son 17 programas, van doce emitidos. Yo tardé unos cuantos meses en hacer
bien una masa de hojaldre, bajemos a tierra, son chicos que no saben cocinar a los cuales les exigimos
muchísimo. Por eso mi supuesta cara de malo, pero hay que ser bastante comprensivos”.

Además, les respondió a quienes lo acusan de ser extremadamente riguroso: “Es cierto que soy muy exigente, por algo me contrataron. Pienso que no soy malo, ser malo es ser destructivo y no pensar en un fin productivo. Mis miradas y reflexiones están todas hechas con el objetivo de que les sirvan para cambiar”.

-¿Cómo fueron tus comienzos?

-Empecé mirando a mi abuela, oliendo la cocina, probando y robando las masas que hacían en la cocina del hotel donde estaba ella. Y mi profesión se inició a los 15, cuando comencé a trabajar de pre aprendiz. A Argentina me trajo un amigo uruguayo que trabajaba con Francis Mallmann, quien necesitaba un cocinero francés para su restaurante en Las Leñas.

-¿Cómo decidiste sumarte a “MasterChef”?

-Cuando me llamaron tuvieron que mandarme videos porque yo desde el 2008 no miraba más televisión. Descubrí el programa y me impresionó, después supe que era muy visto en el mundo entero.
Hice un casting y se ve que me fue bien. Luego nos sentamos con los productores, nos fijamos en el
formato, lo que querían ellos y ahí me enganché.

-¿Qué te dice la gente en la calle?

-Me gritan de todo, pero sobre todo cosas lindas. Hasta los que me critican se quieren sacar fotos conmigo.
Cuando me dicen: “Ay, qué malo que sos”, contesto: “Gracias”, y se ríen.

-¿Cómo es la relación con los otros jurados?

-Excelente. Donato nos brindó un apoyo incondicional. Es una persona muy dada y generosa, que por más que tenga un auge de estrella, se supo poner a nuestro nivel y nos guió mucho y muy bien. A Germán ya lo conocía
por amigos en común, y lo respetaba porque sabía que era un gran cocinero, ya que había comido en su restaurante. Es una persona con criterio, profesional, de una gran gentileza y cortesía. Hace honor a su tierra, a su gente y a sus raíces, y me río mucho con él.

-¿Cómo te llevás con los participantes?

-Tengo una relación cortés. Varios me han pedido vernos y yo les dije que sí, nos vamos a ver cuando
termine el programa. No tengo preferidos, gente que me interesa porque los veo crecer y con ganas
de aprender sí.

-¿Por qué creés que ganan la batalla del rating?

-Pienso que la gente tiene ganas de divertirse. Estoy muy contento de saber que somos muy vistos. No me pone contento ganarle a Lanata, no es una cosa que me conmueva.

-¿A qué famosos les cocinaste?

-A Robert de Niro, Madonna, Prince. Acá en Buenos Aires a Jane Fonda y además a las estrellas locales.
Gustavo Cerati era un gran cliente mío.

Doblaje en “Ratatouille”

“Mi participación en la película fue simbólica, hice una voz de reparto, un cliente que preguntaba: ‘¿Qué hay para comer?’. El fin no era que yo hiciera un rol preponderante, sino que un cocinero interpretara un papel y que aportase algo a la promoción del filme. Me tocó a mí y siento súper halagado”, relató Christophe, y confesó:
“Casualmente, ahora estoy hablando con Disney por otros proyectos”.

Se acerca la definición en “MasterChef”


Este domingo a las 22.15 hs. Telefe presenta un nuevo episodio de “MasterChef” con la conducción de Mariano Peluffo.

En este episodio de “Masterchef” los cinco participantes que siguen en carrera, tendrán la posibilidad de obtener un beneficio extra para la prueba del día, mediante una prueba de degustación. Probarán una sopa de vegetales y deberán reconocer la mayor cantidad de ingredientes posible, en un minuto.

El ganador tendrá el beneficio para la prueba con la caja misteriosa. En esta oportunidad encontrarán ingredientes originarios del norte argentino y deberán crear un plato propio. Esta vez cocinarán en parejas, menos uno que lo hará solo. Los que logren convencer a los jueces subirán al balcón y el resto deberá pasar al desafío de eliminación, que cada vez resulta más complicado de superar.

La prueba para lograr seguir en el concurso será elaborar un plato con productos asiáticos y en esta ocasión “Masterchef” contará con la presencia del chef oriental Takehiro Ohno para evaluar los platos y elegir el mejor.

Verónica Lozano, con nuevas metas: "Me gustaría tener mi propio programa"


Sin dudas, ella es una de las conductoras más queridas por el público. A cargo de la conducción de "AM" junto a Leo Montero, Verónica Lozano está feliz con su presente laboral. Sin embargo, sus ganas de seguir creciendo en su amplia carrera la llevó a desear cosas nuevas.

"La verdad es que hoy en día estoy muy bien y no necesito nada más que lo que tengo ahora. Igual considero que la carrera es larga, sé que algún día va a terminar "AM" y, en ese caso, buscaré otra cosa. En algún momento me gustaría tener mi programa propio, y que sea un show", comenzó diciendo Verónica en diálogo con el diarioCrónica.

Luego, dio detalles de su forma de encarar el trabajo que realiza desde el aspecto estético: "Siempre encuentro la alternativa para no salir igual que el día anterior y estar a la moda. Es algo que disfruto mucho hacer y por eso no me molesta jugar con eso", sostuvo. Y agregó: "Me encanta la pilcha, los accesorios, los zapatos, las carteras, todo. Siempre compro cosas por Internet y tengo a esa amiga mula que cuando viaja a otro país me trae ropa".

Por último, Lozano dio cuenta del amor que siente por su hija Antonia, fruto de su relación con Jorge "Corcho" Rodríguez: "A mi hija le gusta estar detrás de cámara. Se mete mucho en los vestuarios, se disfraza y se maquilla. Siempre anda por ahí atrás. Estoy fascinada con ella y lo adora a su papá, no se lo toques porque se pudre todo. Yo en esa relación no entro porque es solo de ellos dos", concluyó.

Cambios para las tardes de Telefe


Dado que Insensato Corazón ha llegado a su fin, habrá una reprogramación en los horarios de las restantes novelas.

La grilla de programación de las tardes de Telefe sufrirá un cambio importante. Es así como Historias de Corazón, que contiene la serie ER Emergencias, extenderá su duración ocupando el horario de 18.30 hs a 20.00 hs mientras que La Guerrera estará de 17.00 hs a 18.30 hs.

El lugar vacío que dejó Insensato Corazón hará que ER Emergenciasdure hasta las 20hs. Telefe apuesta por la serie médica recientemente incorporada, para ocupar ese lugar.

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