“Cuando vos ves una foto tuya actual te gusta más que una de hace quince años. Eso nos pasa todos. No tenés ganas de ver lo que ya hiciste. Esto me inquieta, pero tengo que reconocer que lo que me da alegría es que le gusta a la gente y siempre hay reacciones nuevas", dice sobre el efecto que le produce verse día tras día en las repeticiones de "Pone a Francella" y "Casado con hijos" que realiza Telefe con buenos índices de audiencia.
"Y -agrega- yo ya estoy como alquilado, porque hice ‘El hombre de tu vida’ y al otro día lo repitieron. En el canal saben que genero dinero y no puedo hacer nada. Como hace décadas pasó con ‘El show de Lucy”, te acordás…”, dice con una sonrisa.
Mientras rueda “Corazón de León”, la comedia dramática de Marcos Carnevale donde interpreta a un arquitecto cuya principal característica física es medir 1.35 metros de altura, confesó a Télam que le gustan los desafíos actorales y que, más allá de las repeticiones, espera también tenerlos en la televisión.
“Un día me llama Marcos (Carnevale) y me cuenta que tiene un proyecto, la historia de un arquitecto que pierde su teléfono móvil, que lo encuentra una joven y atractiva abogada, que se comunican para que ella lo devuelva y esa llamada deriva en un encuentro y el hecho que se da algo entre ellos. Me pareció una buena idea”, recuerda.
“Y entonces recién allí me aclaró que mi personaje medía 1.35 de altura, y me quedé sorprendido porque nunca imaginé que algo así se podía hacer en cine aquí. El desafío me pareció espectacular, porque es una historia que no solo habla de amor sino también de cómo debemos ser menos hipócritas al hablar de discriminación”, confiesa.
El hit televisivo "Poné a Francella" (2001) se convirtió para el actor de películas como la ganadora del Oscar "El secreto de sus ojos", en una suerte de maldición porque tanto ese ciclo, como "Casados con hijos" (2005), que compartió con Florencia Peña y Lousiana Lopilato, entre otros, son al igual que "Los Simpson", comodines de la pantalla de Telefé. (télam)
Desde que se hicieron, estos dos programas se repiten en esa pantalla como un sinfín que ocupa hasta cien horas mensuales, transformándose en los ciclos más repetidos de la historia de la pantalla chica nacional, superando incluso a los memorables de Pepe Biondi en blanco y negro y los de Alberto Olmedo ya en color.
Pero este éxito, paradójicamente, parece alejarlo de la televisión, ya que los últimos trabajos de Francella son en el cine, donde viene consolidando una carrera muy interesante.
Recientemente conformó junto con Nicolás Cabré y Daniel Fanego, el trío protágonico de la coproducción con España "Atraco!", en la que compuso a un ex guardaespaldas de Eva Perón llamado Merello, su segunda incursión internacional después de la mexicana "Rápido y cursi"; ahora, con Julieta Díaz es protagonista de "Corazón de León", el próximo filme de Carnevale, autor de títulos como "Elsa y Fred", "Anita" y "Viudas".
"Soy Bart Simpson -dice con frecuencia Francella, riéndose de las repeticiones de sus ciclos-. Me gustaría hacer algo nuevo para la televisión, como ocurrió con ‘El hombre de tu vida’, que ya se estaba repitiendo un día después del pase de cada episodio. Confieso que eso me da satisfacción porque nunca ocurrió con otro comediante, pero a la vez me inquieta", asegura.
"Por cada pase recibo dinero, pero ese no es el tema, sino que me gustaría volver a hacer ciclos de nivel que me muestren tal cual soy hoy. Aquellos tuvieron su momento, y no quisiera que se conviertan en mi única imagen para siempre", reflexiona.
“Tenía muchas ganas de trabajar con Marcos, sus películas siempre llegan al alma, al corazón, me gusta como narra, como cuenta, y tiene un ojo sensible, que es lo que más me seduce de un director", subraya.
"Esto es diferente a todo lo que hice hasta ahora porque tiene muchos escollos que superar y muchas veces trabajo solo, los encuadres son distintos”, explica con la satisfacción de que el resultado va a ser tan diferente a lo que se espera habitualmente de una comedia dramática romántica, que compensa el sacrificio a la hora de rodaje donde se palpa algo muy diferente a lo que finalmente se verá en los cines.
"Mi personaje tiene que ver con la autoestima de cada uno, la seguridad que se puede o no llegar a tener, porque uno se siente raro cuando le gusta alguien, pero esta peli no habla solamente de lo que le pasa a uno en forma individual sino de lo que le pasa a la mujer cuando se encuentra con alguien diferente y en este caso si importan mucho los prejuicios”, dice Francella.
"Esta película habla de la mirada de los otros, de la discriminación, todos nos llenamos la boca cuando hablamos de discriminación pero puertas adentro no es así. Mi personaje dice que mientras todos sus compañeros crecieron de altura el creció de acá de la cabeza’, cuenta.
"León es un arquitecto exitoso al que le ha ido muy bien en la vida, con una familia, un hijo de altura común, pero el vínculo afectivo, cuando alguien tiene algo como él, cuando se enamora, no es tan sencillo de resolver. Es una propuesta muy interesante no solo por los efectos digitales sino por algo que a mí me gustó mucho que es la sensibilidad del guión de Marcos y el modo en que lo está contando y lo que estoy viendo es algo muy interesante”, asegura.