La actriz que actualmente es Lucía en Taxxi, amores cruzados, lleva una carrera con diversos condimentos, pasando como jurado de reality hasta conductora del mismo formato. En la siguiente nota tres caras de Catherine Fulop.
Corría el año 2002 y la actriz se ponía en la piel de Sonia Rey en Rebelde Way, la ficción teen que tuvo dos buenas temporadas. Aquí Catherine fue la protagonista "adulta" de la serie encarnando una persona muy suelta alejada de las correcciones y en disputa constante con su hija Marizza (Camila Bordonaba) en su etapa de adolescente.
Mucho más cerca en el tiempo, la actriz fue parte del jurado de Talento Argentino (2008) con un perfil más bien artístico pero sin dejar que eso influya en sus decisiones a la hora de elegir quienes pasaban de ronda.
Durante 2012, Fulop fue la conductora de ¿Quién quiere casarse con mi hijo? el reality que propone un encuentro de un hombre y su madre con una serie de candidatas que debían pasar una serie de pruebas antes de ser elegidas o no. Aquí también supo ponerse el programa al hombro mostrando una faceta distinta.
El sándwich de lomito, de no más de cinco centímetros de diámetro, se va consumiendo de a bocados. Entre el primero y el último mordisco, una hora. Eso que uno ve, ella lo usa de ejemplo para contar cómo es su vida en este tiempo. En este año. Carmen Barbieri se acerca a la mesa en la que se hará la nota, come un poquito, se va a hacer la foto para el lanzamiento de la temporada de verano, vuelve, otro pedacito, se va a retocar el maquillaje, vuelve, se va a posar para las fotos deClarín, vuelve y así se va acabando la figacita. Y, de alguna manera, su energía. “Yo soy ésta que ves, no paro nunca. Así estoy todo el día. Pero lo que hice esta vez, de tener cinco trabajos al mismo tiempo, es debut y despedida. Fijate que para las fotos tuve que esconder las manos… no pude ni pintarme las uñas. No tengo tiempo ni para la peluquería ni para pasar un rato con mi mamá”, grafica Carmen Barbieri, yendo de lo práctico a lo emocional sin escalas. “La estética la resuelvo como puedo y a mi viejita la llamo veinte veces por día. Eso no dejaría de hacerlo por nada del mundo”, aclara la mujer que por momentos tiene diluida la frontera entre el trabajo y la familia. Y lo celebra.
“Voy a repetir una frase de la querida y admirada Ana María Campoy. Una vez fuimos a comer ella, su Pepe (José Cibrián), Santiago (Bal, su ex marido) y yo. Todo el mundo hablaba fuerte en el restaurante. La Campoy nos miró a los tres y preguntó: ‘¿De qué hablará la gente que no habla de teatro?’.
Y yo me pregunto lo mismo. A mí todo me remite a lo artístico”, reconoce, ya abajo de los tacones cercanos, sin testigos alrededor, en un rincón de un hotel del Centro donde se hizo la producción fotográfica.
Primero termina el sandwich eterno, luego se toma unos segundos para recuperar la calma y, entonces sí, se entrega a lo Barbieri. Con anécdotas, con detalles, con humor, con emoción, sin relojes. Y eso que no es tiempo lo que le sobra.
Ya sin la gira de Escandalosas, sus días se reparten ahora entre las grabaciones deMalas muchachas -el magazine con aroma a talk-show que realiza con Moria Casán, Sofía Gala (luego de la pelea con su madre no está saliendo al aire), Cecilia Milone y Any Ventura y que va los domingos a las 22, por C5N-, las galas de Tu cara me suena (verAunque la vistan de seda...), los ensayos de Brillantísima y los de Sorpresas, la comedia musical que estrenará el viernes en Mar del Plata, cuando todavía no llegó el verano. Las dos obras se presentarán en el complejo América-Atlas: en la revista (ver“Brillantísima”, la otra...) va como directora y tendrá una participación especial en el arranque de la función, junto a Moria, con quien, además, comparte el protagónico deSorpresas.
“Es el primer y último año que hago esta locura de tener tantas cosas juntas. Agradezco y celebro el trabajo, pero mi salud necesita que afloje un poco el ritmo. Yo antes me reía de una frase que usan mucho los jóvenes, pero ahora entiendo lo que es tener la cabeza quemada. Estoy muy cansada. Tanto, que a veces me cuesta memorizar la letra. El otro día no me acordaba ni de mi número de teléfono. Y para Tu cara me suena tengo que aprenderme una canción cada semana... No sólo la canción, sino la actitud del artista que me toque imitar”, comenta junto a una valija de Mickey que lleva a todos lados: “Así como la ves, ésta es chiquita. Mañana salgo con una más grande... vos pensá que voy de un lado al otro, con vestuario, maquillaje. Soy medio gitana”.
Hoy, de hecho, está en Mar del Plata, ensayando. Viajó el jueves y volverá mañana a la noche, para grabar el martes el reality-talent de Telefe y, el miércoles, el ciclo de C5N. El jueves regresará a la costa, para estrenar al día siguiente.
¿No te dan ganas de tirarte en la cama a ver televisión?
Amo estar tirada en la cama viendo tele, pero no puedo. Para que te des una idea, mamá vive a tres cuadras de casa y no me alcanzan las horas para quedarme con ella. El otro día me dijo: ‘No te lo quiero echar en cara, pero hace 20 días que no venís’ .
¿Qué madre te tocó?
Una genia. Mi mamá tiene 86 años y es Joan Collins, diosa, impecable. Flaca, tiene 110 de colesterol. No podés creer lo que es esa mujer. Manda mails, mensajes de texto. El otro día me envió una foto con un texto que decía ‘Mirá qué lindas están las azaleas’ . Yo pago para llegar a estar como mi mamá. Igual, estoy muy contenta conmigo. Fijate, tengo 58 años, peso 79 kilos...
¿Y para qué quiero el dato de tu peso?
Te lo digo porque todo el mundo dice que soy gorda y, te lo juro, peso 79. Piensan que ando por los 90 y pico. De todos modos tendría que estar en 69 para sentirme más ágil. Ah, me faltó otro dato: mido 1,71. Esta soy yo.
¿Estas contenta con todos esos números?
Sí, estoy feliz. No volvería atrás. Me siento joven. Mi mamá es demasiado joven, es la pendeja que fue siempre. Con Fede (su hijo, de 24 años) se pelea como si fuera una nena, porque él le contesta con mensajes cortos. Mi mamá, como Moria (Casán), nunca va a ser una ‘abuelita’ , no da el perfil.
¿Y vos?
Sí, yo sí. Jamás me operé, no tengo ni medio tajo, podés revisarme. No me estiraría para quedar como andando en moto, asustada. Ahora, si me llega a crecer la papada y me queda colgando, me la sacaría. Eso sí lo haría. Lo que me molesta me lo saco.
¿Con las personas hacés lo mismo?
Sí, estoy haciendo cirugía estética con las personas. Me cuesta. Me saqué y me estoy sacando gente que me hace mal y la sigo queriendo.
¿Estás hablando de Santiago Bal?
No, no estaba hablando de Santiago. No se me cruzó por la cabeza. Seguirá siendo de mi familia toda la vida, porque es el padre de mi hijo, que es hermoso, y es cabrón como él y peleador como yo y como él. Es un pibe derecho. Mi hijo no te va a mentir nunca y, a veces, las verdades duelen. Te lo digo yo, que soy muy sincera y eso a veces me trae algunos problemas (ver La anécdota).
Artista indiscutida dentro del ecléctico pelotón de personajes de Tu cara me suena, Barbieri confiesa tener “una cosa a favor, que tal vez mucha gente olvidó, y es que empecé mi carrera como bailarina e imitadora. Imitaba a Liza Minnelli, a Raffaela Carrá... A mí me echaron del colegio La Anunciata porque era insoportable, imitaba a las profesoras, a la directora, a medio mundo”.
¿Tu cara sonaba?
Me salían bien y todas mis compañeras se morían de risa. Pero me echaron por imbancable, estaba todo el tiempo haciendo la cara de otro. Lo que pasa es que vengo de una familia de artistas: no había domingos de ravioles sin que hubiese artistas sentados a la mesa. Muchos músicos, cantantes de tango, sobre todo. Y siempre se hablaba de radio, de tele, de teatro y de cine. Y mi viejo (el gran Alfredo Barbieri) era el centro. Fue el primer transformista que hubo en el país, se vestía de mina y hacía de Lolita Torres, de Lola Flores... Y yo imitaba al imitador. Bueno, la imitación que le salía genial era la de Miguel de Molina, que era amigo de papá y vivía al lado de casa, en Arenales al 2100. Me acuerdo que Miguelito llamaba a mamá y le decía ‘Haz callar a esa niña que no me deja dormir, coño, joder que no para’ . Miguel, por ejemplo, se bordaba sus blusas, mamá iba, se sentaba al lado y lo copiaba para hacerle lo mismo a papá y después me hacían una chiquita para mí, para actuar subida a la silla de casa y hacía así.
Ese ‘así’ se traduce en un par de movimientos coreográficos que Carmen improvisa ahora para que sobrevuele la magia del español. Sin máscaras ni maquillaje, sólo con talento y memoria. Que los pasados, bien aprovechados, suelen marcar destinos.
El joven galán de la ficción de Telefe habló sobre sus dos años de trabajo intenso en televisión y de su amor con Candela Vetrano. "Hace seis meses que estamos de novios y nos llevamos muy pero muy bien", aseguró Gastón, que adelantó que hará en sus vacaciones, alejado de la pantalla chica.
Está a punto de cumplir 22 años y ya conoció el éxito de la mano de “Graduados”. Además de ser actor lleva adelante el bohemio oficio del músico y es un futbolero de ley. Siempre inquieto, ahora también incursiona en la producción. Feliz en lo profesional con "Vecinos en guerra” y en lo personal, por el noviazgo con la actriz Candela Vetrano.
Ahora, para fin de año, pide parar la pelota y tomarse unas merecidas vacaciones.
-Estás concluyendo dos años de trabajo, ¿cómo llegás en lo personal y en lo profesional?
-La verdad es que muy bien, con mucho laburo. Sí un poco cansado porque tengo muchas horas de grabación encima, pero muy contento. Estoy cumpliendo dos años seguidos en Telefe en donde me tratan muy bien. También en Underground (productora de Sebastián Ortega), donde me siento como en casa. En lo personal, disfrutando mucho de mis amigos, de mi novia y de los pocos ratos libres que me quedan.
-¿Hay algún programa de la tele argentina que te haya atrapado?
-Que realmente me interese demasiado, no. De todas formas cuando algo me cautiva, me prendo. Me parece que hay muchas cosas buenas en la TV argentina y hay muchas películas buenas también. Lo único que veo los fines de semana es fútbol.
-Recién mencionaste el cine, ¿es algo pendiente?
-Sí, ni hablar. Es algo que me gustaría hacer. Estuve en un proyecto pero para Italia, me gustaría hacer algo argentino que me dé la posibilidad de actuar acá. Siempre lo digo y ojalá que lo lea algún productor así me llama.
-¿Cómo estás viviendo tu relación con Candela?
-Hace seis meses que estamos de novios y por suerte nos llevamos muy pero muy bien.
-Teniendo en cuenta que termina el 2013, ¿ya tenés algo cerrado para el año que viene en tele?
-Cerrado no, pero sí tengo una propuesta dando vueltas. Estamos en conversación con Telefe, soy del canal así que la prioridad siempre la tienen ellos. Pero eso no quiere decir que no pueda llegar a trabajar en otros lugares.
-¿Y para la temporada de verano?
-Para el verano me quiero ir de vacaciones urgente. Estoy muy cansado, pero por suerte ya tengo todo arreglado. Un mes me voy seguro y un poquito más también. Si no parás la pelota la cabeza no se detiene.
-¿Qué programaste para las vacaciones?
-Tengo el tiempo dividido. Por un lado me voy de viaje con mis amigos, tengo otro con Cande y con mi familia también nos vamos unos días. Un poquito con cada uno.
-¿En qué consiste el proyecto “Martilleros”, que se menciona por Twitter?
- Es un proyecto que tenemos con amigos. Hace cuatro meses que lo venimos pensando y tenemos muchas ganas de que se haga. Lo vamos a presentar seguramente en el concurso del Incaa (Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales) o buscar algún productor que quiera aportar dinero.
-¿Se puede saber de qué se trata?
-No puedo adelantar nada de la historia porque todavía no la registramos. Sí puedo anticipar que es un policial negro, una comedia que va a tener muy buenos actores. Yo me encargo del casting, porque soy el que está en contacto con los actores.
-¿Te queda tiempo para tu proyecto musical con la banda The Groove?
-Estoy en un parate con la banda, ya nos pondremos de acuerdo para tocar y grabar algo.
"Me gustaría tener hijos sin llegar a ser tan grande de edad. Hice muchas cosas, ya no me mueve tanto tener un nuevo gran logro profesional", confesó Andy Kusnetzoff en el programa "Gracias por venir, gracias por estar".
El conductor también se refirió al vínculo con sus compañeros en el ciclo radial "Perros de la calle". "La gente como Cayetano (quien se hizo presente en el programa) con la que hacemos radio es como una familia", describió.
"Siempre me identifiqué con la forma de hacer periodismo y humor de Jorge Guinzburg. Espero estar haciendo algo similar", detalló el conductor de "Extreme Makeover", el nuevo programa exitoso de Telefé.
También comentó algunos secretos de su vida de joven. "Estudié medicina y psicología, influenciado por los mandatos familiares. Estaba buscando mi vocación. Mis abuelas fueron muy importantes para mí, una murió el mismo día que Raúl Alfonsín. Desde chico mi mamá me enseñó a comunicar los sentimientos", aseguró.
Susana Giménez es una de las estrellas indiscutibles del espectáculo. Como tal es de los famosos que más tapas de revistas tuvo a lo largo de su extensa carrera, a la par de Mirtha Legrand y Marcelo Tinelli, quienes también se ganaron abundantes portadas con sus nombres y sus declaraciones.
En los archivos ocultos de la farándula, Teleshow consiguió los ejemplares de Gente en los años más álgidos y movidos de la conductora del emblemático ciclo, que en sus comienzos se llamó: ¡Hola, Susana!
Año 1989, la por entonces incipiente estrella de Telefe era noticia por su consolidada relación con Huberto Roviralta, a quien declaraba su amor con total libertad sin saber que años más tarde se convertiría en el hombre más odiado de su vida.
"Susana en su momento de mayor éxito y felicidad: 'Se muere por tener un hijo conmigo'", se puede leer en una tapa en la que la diva se muestra ante cámara con un vestido en tono verde con detalles en violeta y su sonrisa característica.
Sin embargo, en lo que a las cuestiones del corazón respecta, no fue el único hombre con el que salió en Gente. Sin lugar a dudas su vínculo con el Carlos Monzón fue una novela que el público siguió en las primeras planas de la gráfica.
El contraste es perfecto, en una primera portada registró el comienzo del amor: el boxeador sostiene a su novia en brazos con un vestido blanco, mientras que en de 1978 la revista titula "Susana y Monzón: El Final" con una foto de una estrella decepcionada. En otra en la que ella está con Roviralta, detalla la publicación en letras negras: "Fotos exclusivas: Monzón desde la cárcel". Anticipo de lo que sería un triste desenlace.
También fue noticia recurrente la relación que la unió al actor Ricardo Darín, con quien en el presente tiene una sincera amistad pero que en un comienzo algo más los acercó. "No sigo enamorada de Darín", declaraba en medio de rumores de una inminente ruptura con Roviralta, un hombre "misterioroso" para el medio mencionado.
La faceta profesional nunca faltó en las tapas. Cada año Susana aparecía en ellas mostrándose espléndida y con ganas de regresar a la pantalla chica (algo que ya no es tan frecuente hoy en día) para encontrarse con la fiel audiencia. "La nueva vida de Susana Giménez", se tituló en una edición del 22 de marzo de 1979.
Amores, pasiones, traiciones, desengaños, desafíos profesionales, fueron algunos de los aspectos que signaron los momentos más importantes en la vida de una mujer que se supo forjar como una verdadera personalidad y que lo sigue haciendo con un estilo inconfundible y trasparente, único de Susana Giménez.
El protagonista de Somos familia, próximo a estrenarse en la pantalla de Telefe, fue elegido por los usuarios de Television.com.ar cómo el galán clásico favorito de la pantalla chica. En la siguiente nota un detalle de cómo le fue a cada uno.
El actor que se pondrá en la piel del protagonista de la próxima novela de Quique Estevanez, fue elegido en primer lugar con un 60% total de los votos. En segundo lugar quedó Gabriel Corrado de Taxxi con un promedio de 23%. El tercer lugar fue para Osvaldo Laport que se prepara para debutar en Mis amigos de siempre.
Desembarcó a Telefe un 17 de marzo después de un excelente paso por América. Hoy, 8 meses después se encuentra consolidado en el prime time extendiendo sus ediciones y buenos resultados.
Peligro Sin codificar representa la síntesis de un año televisivo, que aunque complicado, encontró en los puntales de cada canal la extensión para suplir un año de números bajos. Fue así que Sin codificar transitó un camino evolutivo que lo llevó a posicionarse en el prime time ante varias propuestas que no lograron alcanzar las expectativas. En esa misma dirección, el ciclo comandado por Diego Korol se adueñó del prime time de los domingos en competencia directa con uno de los caballitos de batalla de El Trece,Periodismo para todos.
En este contexto, Peligro Sin codificar cumple 8 meses de estar al aire y ya consolidado en la pantalla de Telefe juega como una de las mejores cartas de este 2013.
