Durante muchos años, con "Gran Hermano" a la cabeza, el verano era el mejor momento para estrenar un reality show. La mayoría se estrenaron en tiempo de vacaciones para conjugar el tema de los "cuerpos al sol" y el ocio de los participantes que era similar al de los espectadores que seguían el programa diariamente.
Hasta el año pasado, el "Soñando por cantar" otro programa de talentos, logró altos niveles de audiencia y aceptación popular, marcando otro suceso dentro del mundo de los reality shows.
Este verano parece difícil para toda la televisión a nivel ratings y los realities no son la excepción de este fenómeno.
Tanto "Operación Triunfo", la banda como "El artista del año", no logran captar la atención del público y a pesar de ser ciclos muy bien producidos y con una conducción impecable por parte de Germán Paoloski y Mariana Fabbianirespectivamente, no llegan a la audiencia y navegan en la indiferencia de los que antes seguían casi con devoción.
¿Será la televisión del verano que esta "seca de rating"? ¿Será que el formato está agotado? o ¿Será el fin de una era que reinó en todo el mundo durante más de una década y ahora está llegando lentamente a su ocaso?
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