Se la ve radiante y nos alegramos. Al excelente año laboral Carina Zampini sumó el amor, lo más importante, con un camarógrafo llamado Alejandro, con quien “blanqueó” la relación llevando a su hijo Manuel y a los chicos de su pareja, Octavio y Violeta, a ver a Federer vs Del Potro.
Carina tiene por delante tres semanas de vacaciones, después de un mes donde ni respiró para grabar con todo el elenco los capítulos de “Dulce amor” que le permitan volver al trabajo recién el 9 de enero.
Pero ella sabe que su trabajo en el personaje de Victoria Bandi lo vale.
Los fans la adoran y vive un increíble momento profesional. Tan bueno como el personal. Una conjunción astral para una persona que merece, por buena gente, todo lo que le está pasando.
La Ubfal
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