Homenaje a Romina Yan

Romina Yan fue una actriz que se destacó desde muy joven por su simpatía y talento. Miles de chicos y adolescentes siguieron su exitosa carrera y la acompañaron en cada uno de sus proyectos tanto televisivos como teatrales. La hija de Cris Morena y Gustavo Yankelevich dio sus primeros pasos junto a su mamá en el programaJugate Conmigo, donde un grupo de jóvenes se reunía para pasar una buena tarde, entre competencias, prendas, canciones y bailes.

Después llegó Quereme, su gran desafío en televisión porque, por primera vez, tenía que mostrar su talento como actriz fuera del ciclo juvenil, en la novela que se emitió en 1994, y donde ella representaba a Sol Iturbe.

Más tarde, Romina protagonizó el gran éxito de su carrera, un programa infantil que marcó tanto su vida como la de los espectadores que hoy la recuerdan. Muchos veinteañeros aún saben de memoria las canciones que la hija de Cris les cantaba a los chicos del hogar Rincón de Luz en Chiquititas.

El éxito fue tan grande que llegó a romper las barreras del Idioma. Chiquititas se transmitió en varios países y fue traducido en lenguas tan diversas como inesperadas. Israel fue un lugar que se enamoró de este programa y recibió a sus protagonistas como ídolos y muchos chicos aprendieron el idioma gracias a las canciones que Romina interpretaba.

Romina brilló también en el teatro, donde además de cantar y bailar, les dejaba un mensaje a los chicos.

Además de actuar en Chiquititas junto a Facundo Arana, en 1999 protagonizó con el galán la película Rincón de Luz, donde participaron jóvenes estrellas como Luisana Lopilato, Camila Bordonaba, Felipe Colombo y Benjamín Rojas, que después encararon otro éxito de Cris Morena, como lo fue Rebelde Way.

Además de actuar juntos y ser partícipes de un éxito, Romina y Facundo forjaron uan gran amistad, que trascendió el ámbito laboral.

Pero Arana no fue su único galán en televisión, la actriz se dio el gusto de protagonizar la ficción Provocame junto al cantante internacionalChayanne y la modelo y actriz Araceli González.

Junto a Iván Espeche protagonizó el programa Abre tus ojos. En ese rol tuvo el gran desafío de interpretar a una joven ciega y el programa se transmitió en varios países de América Latina.

Después llegó su papel enAmor Mío, con lo que pudo demostrar que era capaz de salir del lugar de programas infantiles o personajes dramáticos. Romina incursionó en la comedia con Damián de Santo y consiguió mucho reconocimiento de un público más adulto, que, hasta ese entonces, no la había tomado tan en cuenta.

Tras el éxito de Amor Mío, la pareja protagónica se volvió a juntar para encarar un nuevo proyecto con el formato de sitcom. Fue así como surgió Bella y Bestia.

En 2008, Romina volivó a participar en cine, con el filmHorizontal/Vertical, en el cual trabajó junto a Darío Grandinetti y Mike Amigorena.

Yan decidió volver a trabajar junto a su madre al aceptar un importante papel en la ficción Casi Ángeles que, si bien iba a ser por pocos capítulos, terminó quedándose en varias escenas importantes del programa.

Su última participación en televisión fue en la serie de Benjamín Rojas, Jake & Blake.

Después de ese papel y mientras encaraba varios proyectos para su futuro, Romina Yan sorprendió a todo un país con una muerte inesperada, que, sin dudas, conmovió a toda la sociedad. Desde ese entonces, en Internet cientos de fans le dedican páginas, videos y recuerdos.

Dos días después de su muerte, sus fans le dedicaron un homenaje en el Teatro Gran Rex, donde coreaban las canciones de Chiquititas y la recordaban con alegría y emoción.

Su padre, el productor Gustavo Yankelevich, le dedicó unas palabras durante la última entrega de los Premios Martín Fierro, ante un auditorio de pie y emocionado hasta las lágrimas.

Romina Yan dejó no sólo dejó una familia, una madre, un padre, un hermano, un marido y tres hijos, sino que dejó un sabor amargo en cientos de personas que crecieron con ella y que soñaban con seguirla en una carrera exitosa. La nostalgia de todos los que crecieron con ella sigue vigente a un año de su muerte. Su trabajo, sus canciones y su alegría son parte de la vida y la infancia de miles de chicos de todo el mundo que, hasta el día de hoy, siguen buscando a esa Chiquitita interior.

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