Antes del estreno de La voz argentina, Marley sus expectativas respecto el rating y sobre cómo ve a la competencia.
¿Cómo te preparás para el día del debut?
Con mucha ansiedad. Hace más o menos un año había visto el programa en Estados Unidos, cuando empezó la versión con Christina Aguilera, y me encantó. Así que hablé con Tomás Yankelevich y le dije que si pensaba comprar el formato que pensara en mi. Por suerte lo compró y como primero estaba Minuto para ganar, tuve que esperar un montón para este momento que por diversos motivos se fue demorando.Minuto para ganar era tan exitoso que seguía y seguía y ahora por fin llegó el momento de La voz.
¿Necesitabas hacer otra cosa?
Sí, me gusta cambiar. No me gusta hacer siempre lo mismo. Venía con Minuto para ganar que era como más humorístico y esto es simpático, con momentos agradables, pero con otro estilo, incluso muy diferente a Operación triunfo. Esto no es un reality como Operación triunfo, sino que tiene tres etapas muy marcadas: el casting, la batalla y la presentación de los finalistas que ya arranca con programas en vivo y todo queda más en manos de los participantes por eso la conducción va a ser diferente en cada fase.
Después de tantos éxitos, ¿sentís más presión con cada nuevo programa?
Por ahora nos fue bien. Está bueno que el canal confíe en mi y que siempre haya podido devolverle buenos números de rating. Y está bueno que el público me siga en proyectos que son tan distintos entre sí. Que pueda estar riéndome con Florencia Peña por el mundo o presentando biografías de traje o en El Muro infernal y que la gente me siga.
¿Cómo ves Soñando por cantar que también está en pantalla?
Son programas muy distintos. Lo único que tienen en común es que hay gente cantando. Pero más que eso, no tienen nada en común. En La voz sólo se valora el talento, los jurados están de espaldas y no tienen idea de las historias de los chicos, qué pasó esa persona ni cómo se ve físicamente. Y aparte es una competencia entre los coach con los participantes, así que casi no tiene punto de comparación con Soñando por cantar.
¿Qué expectativas tenés sobre el rating?
La verdad que no sé. Hasta ahora los domingo van cambiando. Me acuerdo cuando hicimos Operación Triunfo que arrancamos con 16 y terminamos con 44. Hay que ir ganando al público, no todos ven los primeros programas, algunos se enganchan después, a medida que transcurre. En Odisea llegábamos a 30 puntos, Minuto para ganar llegaba a 25, así que en general me fue muy bien los domingos. Y en este momento no hay tantos números. Otros programas están midiendo entre 13 o 14 puntos. Así que no sé con qué nos vamos a encontrar. Pero uno siempre se sorprende. El público es el que elige. La Voz es un programa que ya se hizo en muchísimos países y en la televisión holandesa es el más visto. Incluso en otros países también pasó eso, así que creo que también puede pasar en Argentina porque es salgo muy diferente a lo que se viene viendo acá.
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