Roberto Carnaghi reveló cuáles son las claves de Graduados para ganarle noche a noche en rating a Bailando 2012. En charla con el diario Crónica, el legendario actor explicó, además, que para él "no es una novedad superar a Tinelli" ya que lo venció cuando actuó en Montecristo.
Hombre de rioba al mango. Conoce a fondo y, desde chico, pudo meterse en ese mágico, nocturno y laberíntico universo que constituyen los bares, los billares y los clubes y bailes de barrio. Sabe a fondo de la filosofía del vivir, del día a día y de sus personajes, pero a su vez se especializó en los grandes personajes de la historia, de los grandes textos, de la literatura universal en definitiva.
Roberto Carnaghi es así, todo terreno, lo hemos visto transitar la revista, el humor, la comedia, género que sigue recorriendo con mucho éxito y los grandes roles de las obras universales, como el que llevó a cabo recientemente en “Las brujas de Salem”, de Arthur Miller.
Punto de encuentro: La Academia, mesa pegada al ventanal, Callao de noche, clima inestable y excesivamente húmedo. El ruido de las mesas de billar viene de atrás, lento, dispar y se disipa entre el murmullo de la clientela. Un ritual que no se pierde: la lectura y los debates, las discusiones, el país, el fútbol, las minas.
Roberto observa ese mundo y lo asevera una y otra vez que pertenece, desde sus orígenes y en su “escuela”, a esa identidad. Ya han pasado los años pero persiste esa identidad.
El actor vive hoy una circunstancia muy especial en su carrera: hace el personaje del judío "Elías" de la ficción más vista de la televisión argentina: “Graduados”, la producción de Underground que lidera, en forma absoluta, el rating.
“No tengo dudas de que “Graduados le gusta a todo el mundo. Se divierten desde los chicos hasta los adultos. Uno nunca puede precisar cuándo algo se va a convertir en un éxito, pero palpamos de entrada que algo especial iba a ocurrir. Además, por el espíritu de camaradería que tiene el grupo”, aseguró en charla con el diario Crónica.
Roberto destaca que “yo formo parte de una familia judía pero que es, en definitiva, una familia bien argentina. Son judíos modernos, con su problemática y necesidades pero actuales. Y me paran en la calle, precisamente, personas judías que me dicen “nos sentimos plenamente identificados con lo que le sucede a ustedes".
Y esta es, en definitiva, la magia que tiene el televisor. Esa cosa aglutinante es la que permite abarcar muchas cosas y darle un sello muy personal. Y hablando de personal, desde la autoría, precisamente “Graduados” cuenta con vivencias puntuales ya que Ernesto Korovsky, uno de los autores, nos confesó que le imprimió cosas propias y de su vivencia familiar.
-”Graduados” genera en sus historias, cruzamiento de personajes y sobre todo un hecho puntual: separaciones y nueva formación de parejas...
-Es verdad. Y esto se aborda. Cambió la sociedad, en este sentido, y están los que reinciden por cuarta o quinta vez consecutiva en el matrimonio. Esto forma parte de crisis, de cambio.
-¿Cuál es otro de los aspectos de principal atracción del programa?
-No tengo dudas que es esta suerte de revival y vuelta a los años 80. La posibilidad de encontrarnos, otra vez, con situaciones en la que uno se puede sentir plenamente identificado.
-¿Se imaginaban que iban a superar en el rating a un tanque como Tinelli?
-Yo ya he tenido la posibilidad de superarlo, experiencia personal mediante, desde “Montecristo”. No es para mí una novedad.
-¿Cuáles fueron, igualmente, a tu entender que la gente se haya volcado más a “Graduados” que al “Bailando”?
-Por lo que uno se puede interiorizar en la calle es que el público se cansó, se aburrió de una mecánica en donde la pelea, el insulto y la desacreditación forman parte de una constante. Te aclaro, yo no estoy en contra de Tinelli y tiene todo el derecho de hacer lo que quiera, pero cuando ese producto se convierte, además, en disparador de temas de otros ciclos, la cosa ya, me parece, que agobia. Y con esta dinámica, entiendo, que quedan sin trabajo actores, técnicos y productores que podrían estar empleados para otra cosa.
-¿Hasta cuándo siguen?
-Hasta diciembre. Se amplió el plazo.
-¿Teatro?
-Lo veo difícil por los compromisos de cada intérprete y por la amplitud de personajes y elenco para hacer en un escenario.
-¿Cine?
-También difícil, pero no imposible.
Diario Show
No hay comentarios:
Publicar un comentario