El desafío era grande: Isabel Macedo no sólo debía interpretar dos personajes en Graduados, sino que debía darle vida a dos personalidades completamente opuestas. Por un lado, es la tímida y discriminada Jimena Benítez, que veinte años después de egresar de la secundaria se transformará en la inescrupulosa Patricia Longo.
Además del esfuerzo actoral, Isabel debe someterse a una verdadera transformación física para caracterizar a Jimena, una adolescente con problemas de sobrepeso que padece las bromas (crueles) de sus compañeros.
“Me ponen pegamento en la cara, una máscara y el traje es de goma espuma, la panza es de guata. Tengo pantorrillas de goma, uso cuatro pares de medias de nailon. No me pesé con el traje puesto, pero estoy segura de que debo andar en los 100 kilos”, había relatado Macedo al diario Muy, sobre el disfraz que debe utilizar para grabar sus escenas de la década del ochenta, similar al que Gwyneth Paltrow utilizó para el filme Amor Ciego.
Isabel, que por estas horas debe afrontar nuevos rumores de separación del futbolistaFederico“Pocho” Insúa, subió a su cuenta oficial de Twitter el proceso paso a paso en fotografías de su increíble transformación.
En las imágenes se puede ver cómo le colocan la máscara a Isabel y la maquillan para que se convierta en la sufrida Jimena: “Siii, 3 horas después, un reconfortante mate que me trae @lauhair (que piensa en mi bienestar y se da cuenta que con todo ese traje necesito mimos)”, escribió en la red social Macedo, ya en la piel de su personaje.
Ciudad.com
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