La conductora llegó a la ciudad el 28 y estuvo muy bien acompañada por los que más quiere: su hija Mercedes Sarrabayrouse y su nieta Lucía Celasco. Cada una estuvo con sus novios, Joe Miranda y Joaquín Rozas, respectivamente.
Con ellos almorzó en Baires Grill -el restaurant por el que pasan todos los famosos argentinas en cada visita a Miami- el jueves 30. El menú elegido por Susana fue una ensalada de atún. Ese plato lo acompañó con un agua San Pellegrino. El resto optó por las empanadas a la parrilla de cebolla y queso como entrada y entraña con ensaladas y papas fritas de plato principal. Los postres fueron panqueque de dulce de leche y flan con crema y dulce de leche.
Ese día, más tarde, coincidió con Nacho Viale, en un café. Con una charla amena, Susana disfrutó ese encuentro con el nieto de su amiga Mirtha Legrand.
El momento de shopping, una de las actividades favoritas de la diva cuando está en Norteamérica, llegó el domingo 2 de febrero. Susana arribó al mall Bal Harbour con su hija Mecha y no dejó ningún local de las marcas más importantes sin visitar. ¿Qué se compró? Un regalo de Dolce & Gabbana, entre otras cosas. Otro lugar en el que estuvo de compras fue la farmacia CVS y se llevó algunos artículos de belleza.
Del mall se fue en su nuevo Mercedes Benz. ¿Qué pasó con su Rolls Royce? Ya tenía varios años de antigüedad y decidió cambiarlo para evitar problemas. Antes de subirse a su nueva "máquina", bromeó con un policía de Miami, George Waisman, nacido en Tucumán: le pidió que no le haga la multa si la ve ir rápido por las calles de la ciudad.
El resto del viaje lo pasó en su casa de Venetian Island, su lugar en Miami.
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