-Estás en pareja con Lali, estás muy bien, casi en convivencia… ¿te ves como padre?
-¿Quieren que sea padre? ¿Se hacen cargo ustedes? (bromea). Ja, ja. La verdad es que no lo sé, no lo pienso ni lo planeo. Pienso que es una situación que se celebra si viene con amor. No me veo padre ahora, pero si llega, nunca abriría más los brazos para recibirlo.
-¿Te gustaría formalizar la convivencia, casarte? ¿O lo ves más lejano?
-No. La verdad que nosotros no planeamos la parte formal de la pareja. Somos más partidarios de lo informal. Por ahora, no. La pasamos bomba así, no tenemos pensado eso.
-Como actor y pareja, ¿te sorprende la relevancia que adquirió el personaje de Lali en Solamente vos?
-No me sorprende para nada. Celebro que Adrián Suarse haya dado cuenta del potencial, aunque ya sabía quién era ella por distintas razones. Lo tiene muy merecido, es una gran actriz y está ocupando un lugar en una franja horario central y con una historia como las que hace Suar que no había hecho antes. Lo tiene más que merecido.
-¿Estás preparado para recibir una crítica lapidaria de Elizabeth Vernaci llegado el caso?
-¡Me encanta! No me importa nada. Es más, que te destroce la Negra es como que te haga un gol el Diego (Maradona). Es un honor. Ella tiene ese estilo y lengua de espada. Es como un sopapo que después lo lucís.
-¿Cómo fue el encuentro con Cacho Castaña (otro de los jurados de Tu cara me suena)?
-Genial. Es como un personaje de la mitología porteña, tiene ese andar cansino, esa forma de mirar. Yo admiro a Cacho, es un grande de la canción. Es otra de las partes de diversión que tiene este proyecto. Y Cacho debe tener un manual para todo tipo de situaciones con una señorita. Es como un mago, el Mandrake porteño. Voy a pedirle recomendaciones a Cacho, no lo había pensado...
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