El punto justo entre tierno y bomba sexual. Cauã Reymond se pone cada tarde en la piel de Jorgito, el hijo de Carmina y amor de Nina en Avenida Brasil y hace suspirar a la platea femenina.
En esta nota, el actor brasileño cuenta cómo es ser parte de la novela más exitosa. ¡No te lo pierdas!
Avenida Brasil es un éxito ¿Qué hace que públicos de países tan diferentes queden conquistados por esta novela?
Creo que el texto de João Emanuel Carneiro es fantástico, construyó personajes, con ambigüedades, con varias posibilidades, sale de un lugar esquemático. Tengo que quitar la palabra “creo” y decir: es por causa de la dirección, es por causa del texto, es por causa del conjunto de actores. La dirección ayudó mucho a escoger al elenco, colocar a las personas en los papeles correctos, precisamente. Tuvimos un marco en la dramaturgia con Carmina (Adriana Esteves). Ella hizo uno de los mejores trabajos en una novela, que apalancó a todos nosotros, al resto del elenco. Y esas cosas del éxito a veces no tienen una receta, si no uno la conseguiría repetir. Por más que tengas una meta clara, un buen texto, tomes a los actores correctos, a veces no consigues llegar al éxito por más que hagas un buen trabajo, un trabajo con una calidad alta. Pero cuando agradas al público es… suerte, ¿no? Es una cosa especial así. Yo agradezco mucho ser parte de una novela que llegó a tantas personas y continúa llegando.
¿Cómo definirías a tu personaje Jorgito?
Es un chico que fue abandonado en un tiradero, que fue criado por mamá Lucinda que es una señora que cuida de varios niños que también fueron abandonados, y, tiene la suerte de ser adoptado por Tifón, un jugador de futbol súper famoso, carismático, querido, jugó en la Selección, y por Carmina. Instintivamente no le gusta el personaje de Carmina, y, por eso hasta parezco de cierta forma un rebelde sin causa pero más tarde descubro por qué no me llevo tan bien con ella.
Tu personaje tuvo una infancia complicada, pasó por muchas necesidades. ¿De qué forma eso afectó tu personalidad?
Pasa por un trauma, de abandono, pero de cierta forma él encontró mucho amor ahí en el hogar de mamá Lucinda. Y encontró mucho amor también con ese padre, con Tifón. Carmina siempre intenta dar mucho cariño, mucho amor a ese niño, pero ellos acaban teniendo una fricción, podemos decir. Yo tengo personas en mi familia que fueron adoptados y conseguí entender por la proximidad, que quieren saber por qué fueron abandonados, continúan la vida en busca de esa respuesta. ¿Por qué? Entonces creo que eso afecta a la autoestima del personaje. Él es alguien que tiene una autoestima baja.
Tu personaje mantuvo un amor de la infancia que lo acompañó en su vida. Hablame un poco de ese amor.
Cuando Jorgito es pequeño antes de ser adoptado, él era llamado “Patata” y se enamoró de Rita y ahí ellos construyeron una relación súper fuerte en una situación difícil. Creo que todo el mundo que se encuentra en una situación tan difícil, acaba construyendo un eslabón. Más tarde él se vuelve a encontrar en la trama con esa niña, que es Rita y ahí ese amor aflora nuevamente.
Tu personaje sueña ser un jugador de futbol famoso, ¿Cuán importante es para él?
Creo que lo quiere porque en muchos lugares del mundo la carrera de jugador de futbol es un sueño, ¿no?. Son personas que hasta los treinta años hacen mucho dinero, y además esa emoción que debe ser el hacer un gol en un estadio lleno, pero creo que principalmente él quería agradar a su padre que había sido un gran jugador, de un carácter muy bueno, carismático, querido por todos, con el objetivo de darle un poco de lo que recibió.
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