"Son solo rumores"

Jey Mammon contó que aún nadie de la producción de Susana Giménez se comunicó con él para proponerle ser el reemplazante de Gasalla. La versión apareció en las últimas horas, después que la enfermedad de Antonio saliera a la luz.

Apenas se conoció la baja de Antonio Gasalla al programa de Susana Giménez por sus problemas de salud, Jey Mammon fue el primer nombre que sonó para reemplazarlo en la sección humorística. Ante tanto rumor, el cómico rompió el silencio y dio su versión.

“Son sólo rumores y la verdad no se nada. Me llaman de todos los medios todo el tiempo”, aclaró en diálogo DiarioShow.com. Pero no se hace el distraído: “Se que hay un run run importante y todo el mundo me pregunta, pero de verdad, no se nada”.

“Ser el reemplazo de un tipo como Gasalla es algo medio incompatible. Quiero aclarar que esta bola no la generé yo", agregó el humorista.

Gasalla prometió su presencia para el lunes y se despedirá el ciclo de la Diva que se emite por Telefe. La semana pasada se supo que Antonio tiene cáncer de piel y que por esta razón tiene dificultades para llevar adelante su trabajo. ¿Llegará Jey?

El humorista forma parte del elenco de “La Pelu” que se emite por Telefe, pero niega haber escuchado algo en concreto en los pasillos: “Cuando voy a hacer mi segmento con el pianito, es todo muy rápido, están todos a mil y nadie me dice nada. Igual me parece que si es algo que no sucedió, no hay nada que aclarar. Creo que si me tienen que decir algo es para ir. Lo tomo sólo como lo que es, un rumor”.

Su realidad es su programa en radio Pop y en Telefe con Flor de la V, pero le tiembla la voz ante la chance de estar junto a la Diva: “Que se hable de la posibilidad de estar con Susana para mí es como tocar el cielo con las manos. Tengo la peluca preparada, me llaman, la meto en un bolso y salgo corriendo. Pero se que es un desafío importante y lo asumiría con compromiso”.

Su personaje de Estelita, en sí, nace con Susana: “Yo hacía radio por Internet y la idea era, desde el anonimato, llamar a famosos. Surgió llamarla a ella, una Diva, para ponerme a la altura de ella. Y respondió con tanta buena onda porque se pensó que era una travesti. El día que se enteró que era yo, me quiso asesinar. Pero se mató de risa. Por eso para mí es lo máximo, Susana es Diva, pero está tan en el llano, que no se puede creer”.